miércoles, 21 de marzo de 2007

Curso de guión cinematográfico orientado a la Ciencia Ficción (II)

El objeto de los ejercicios anteriores fue el de que ustedes vayan preparando su mente y su pluma (¡qué romántico: debí haber dicho "su teclado"!) para estructurar la descripción de las situaciones dando señales exteriores, visibles, del estado de ánimo de los personajes: esto es importante porque el director es el que, comprendiendo las instrucciones de ustedes, se encargará de indicar a los actores cómo deben evidenciar las emociones. Insisto en esto porque es una de las partes más difíciles del guión literario, que es el que estamos haciendo acá, por oposición al guión técnico, que es el que contiene indicaciones tales como posiciones de cámara, sonidos acompañantes y, en general, de todo aquello que finalmente se verá en la película.

Sigamos con la representación de situaciones: en la entrega anterior hablé de diálogo adicional: cuando no hay manera de mostrar algo en pantalla, y ese algo es necesario, se puede crear un personaje secundario o un diálogo que originariamente no se tenía planeado, para explicar la situación: si tomamos como ejemplo el de Juan acongojado por la muerte de su madre, podría ocurrir que no veamos manera de señalar esta situación de manera inequívoca, y sabemos que es absolutamente necesario que se sepa por qué Juan está acongojado. En ese caso podríamos crear una situación, tal como que aparezca un vecino y...

VECINO (PALMEÁNDOLE SUAVEMENTE EL HOMBRO)

Juan, a pesar del dolor, tratá de verlo así: tu
madre ya no sufre más...(...etc.)



Sin embargo, no lo recomiendo como técnica habitual: es preferible acostumbrarse a rehacer las escenas porque, si no, se corre el riesgo de crear muchas situaciones innecesarias que podrían confundir al espectador: ¿este tipo que apareció, tiene algo que ver?... y preguntas así que se pudiera hacer el espectador son veneno para la película.

A propósito, por el parlamento (así es como se llaman las líneas de diálogo de cada personaje) de arriba ya van ustedes teniendo una idea sobre cómo presentar el texto: centrado, con la indicación del personaje en MAYÚSCULAS (en general; algunos usan negrita) y los parlamentos en sí centrados, sin el guión largo que se emplea cuando se escribe cuentos o novelas.

Respecto de la indicación de las situaciones, pues, por ahora no diré más, salvo recomendarles que miren muuuuchas películas y observen si las situaciones en las que hay que narrar algo intangible, como una emoción, se resuelven con palabras o si hay indicadores adicionales (en nuestro caso, por ejemplo, mostrar una foto de la madre de Juan, con él mirándola desolado, después de una toma en la que se lo ve saliendo de un cementerio).

En nuestra próxima entrega empezaremos con los conceptos de idea argumental, conflicto, personajes. Si empecé con la forma de pensar, por así decir, un guión es porque he visto que este aspecto ha menudo se desdeña y suele ser fuente de problemas más adelante, porque el guionista en ciernes suele captar con bastante rapidez los conceptos que mencioné más arriba en este párrafo, pero se topa con que tiene dificultades para diseñar las escenas de manera que sean visualmente aceptables (esto es, que se comprendan con sólo mirarlas y con un mínimo de parlamentos).

Espero sus comentarios, quejas, muñequitos vudú con mi vera efigie pinchados y, también, preguntas, en la próxima edición, para así poder empezar el análisis de las características de los personajes y situaciones de las películas de ciencia ficción.

Buenas noches.

Daniel Ricardo Yagolkowski

sábado, 3 de marzo de 2007

Curso de guión cinematográfico orientado a la Ciencia Ficción (I)

Señoras y señores, por gentileza del señor conductor, heme acá de vuelta: ¡LA MOVIOLA está girando otra vez!... y mucho de ello se debe al director de Cinefanía, que tuvo la generosidad de dejarme la puerta abierta para su publicación electrónica.

Y basta ya de prólogos: La Moviola gira con aires de renovación y, a partir de este año, no sólo hablaremos de cine de C.F. (¿recuerdan esta sigla?) de décadas pasadas y traeremos juegos relacionados con ese tema sino que L.M. brindará activa participación a sus lectores: ESTE AÑO DAREMOS UN PEQUEÑO CURSO SOBRE GUIÓN CINEMATOGRÁFICO y lo orientaremos hacia la C.F. No pretendemos superar los cursos que dictan institutos ni profesionales de renombre, pero sí intentaremos hacer que ustedes puedan tener elementos para crear su propio guión, entender mejor una película y, en gene-ral, adquirir un poco más de cultura de cine. Así, pues, damos comienzo a nuestro

Curso de Guión Cinematográfico Orientado a la Ciencia Ficción

La idea del curso es la interactividad: les daremos información acompañada por ejercicios que ustedes harán. En las clases siguientes se comentará y analizará su trabajo, con el ob-jeto de que, entre todos, nos vayamos puliendo. Al final, la idea es que realmente elabore-mos un guión que podamos presentar a los organizadores de Buenos Aires Rojo Sangre y, ¿quién sabe?, quizá habremos de estar dando pie a un nuevo creador cinematográfico. Acla-rado esto, comenzamos por el principio (¿por dónde, sino?).

Literatura Visual

Escribir un guión entraña una técnica diferente de la redacción literaria normal: en un guión hay que tener presente, SIEMPRE, que es la base para un producto audiovisual o sea, que tiene imagen y sonido, lo que significa que cuando escribimos tenemos que ver la situación que se plasmará en imagen. Veamos un ejemplo concreto: escribo un cuento y presento esta situación: Juan estaba desolado por la muerte de su madre. Clarísimo, ¿no? Pero, ¿qué pasa si quiero usar esta misma situación en un guión (inclusive, si quiero adaptar este su-puesto cuento, actividad que también veremos acá, como guión): de inmediato surge el problema de la imagen: ¿cómo indico que Juan está desolado? Puedo indicar “Juan está llorando en forma desconsolada”…sí, claro pero, ¿por qué llora? Porque muy bien podría deberse a que le duele una muela, fracasó en un examen o el médico le dijo que tiene cán-cer. Entonces tenemos que indicarlo RÁPIDO Y BIEN en el texto del guión porque, y esto es una regla de oro: el guión debe mostrar más imagen que palabras. Esto quiere decir que no es aconsejable poner un locutor que narre en off (ya veremos esta expresión). Así, pues, tendremos que mostrar otros elementos, así como diálogo adicional (ya veremos esta expresión), que revelen con claridad el problema: por ejemplo, “Juan toma un retrato que está sobre la mesa y, llorando desgarradamente, dice:

¡Mamá, mamá, ¿por qué te fuiste?

Pero, claro, el “te fuiste” no es claro (a lo mejor, la noble señora se fue con el lechero, por ejemplo, pero no abandonó este mundo). O sea, hay que modificar… En fin, ésta es una brevísima aproximación al problema, que después desarrollaremos. Por de pronto, para que vayan afilando los colmillos, dejo a ustedes, amados lectores, el ejercicio de rearmar vi-sualmente las situaciones que vienen a continuación. Sé que les di muy poco, pero ésa es la idea: que vayan desarrollando su capacidad intuitiva. Acá, los ejemplos:

1) Juan y María se aman profundamente, pero deben cortar su relación.
2) Juan está sumamente feliz porque logró su doctorado.
3) María está atormentada porque cree que Juan la engaña.
4) A pesar de que todo parece sonreírle en la vida, Juan siente una profunda desazón por sus malas experiencias sentimentales.

Traten de hacer los ejercicios de manera de cumplir con estas condiciones:

a) que la situación resulte clara visualmente,
b) que se use pocos sustantivos abstractos (amor, odio, pena…) (Si no lo descubren solos, después veremos por qué).
c) que el texto de ustedes ocupe el menor espacio posible: usen una página tamaño ofi-cio y procuren que, como máximo, toda la situación ocupe una página y media.

Desde ya, ¡gracias a todos! ¡Qué bueno es haber vuelto!

Daniel Ricardo Yagolkowski